Mi tío vio a Hobi más cerca de lo que yo lo vi
ARTE Y CULTURA
Artemisa de los Ángeles Bautista Cruz
¿Te has imaginado en el concierto de tu artista favorito? En mi caso un día estaba viendo la proyección del concierto de un integrante de BTS en el cine, y al siguiente año estuve en el concierto de un integrante de BTS, J Hope, o Hobby, como se le apoda de cariño entre la comunidad de admiradores.
El paso del tiempo desde la adquisición del boleto se hizo demasiado corto, ¿quién diría que estaría días antes preparando regalitos (freebies) para las personas a las que les deseé que se les fuera el internet? Sin olvidar que al igual que todas preparé mi outfit con demasiado tiempo de anticipación.
La cuenta regresiva iba disminuyendo, hasta que el viernes 21 de marzo, a las 10 de la noche me encontraba abordando mi transporte para llegar a la Ciudad de México. Todo parecía ir bien, las Armys de la Urvan eran amigables y la empresa nos dio un bote temático de recuerdo.
Llegamos a la ciudad cerca de las 5 am y todas reservaron habitación en uno de los hoteles con los que tiene convenio la empresa transportista, para descansar un rato y poder arreglarse después. Pude dar una pequeña vuelta por el centro de la ciudad antes de arreglarme para ir al concierto, ya que la Urvan nos llevaría a las 2:00.
El trayecto del hotel al Palacio de los Deportes es muy corto, pero había algo de tráfico ya que Shakira iba a dar un concierto justo frente a dicho recinto, pero en todo ese trayecto estuvimos escuchando y cantando las canciones que horas más tarde estaríamos gritando.
Apenas llegamos al Palacio de los Deportes con mis amigas Jimena y Lupita, nos lanzamos en búsqueda del Army Zone, ya que estarían regalando una photocard exclusiva y original a las chicas que entraran al concierto; en ese trayecto nos encontramos a Danaí, la amiga que dio el tarjetazo de nuestros boletos.
La verdad es que, aunque teníamos “demasiado tiempo” antes del concierto, se hizo muy poco.
Después de estar en el Army Zone, bajamos al carrito de Spotify para dejarle una carta de amor a J Hope, en ese lapso de tiempo también estuvimos intercambiando freebies y me pude comprar una chamarra. Al sentir que ya cargábamos con muchas cosas decidimos regresar a la Urvan a guardarlas y descansar un par de minutos; en ese pequeño transcurso de tiempo me encontré con mi tío, quien me acompañaba y vestía el jersey que sacó J Hope para México.
Después de un par de fotos y despedirnos era momento de irnos a formar para poder entrar. Al formarnos logramos hacer dos amigas de Tezonco que nos contaban cómo apenas tenían nuevo metro y se sorprendieron al escuchar que éramos de Oaxaca, ya que para ellas es algo lejos.
Fue justo en este momento de la espera cuando se empezaron a escuchar gritos diciendo que acababa de salir J Hope a saludar. Mi amiga Jime y yo nos lanzamos a correr mientras las otras seguían formadas, y aunque aún no veía nada, y corría en búsqueda del amor de mi vida, las lágrimas salían por mis ojos, pero lamentablemente no pudimos verlo.
Lo que más me sorprendió fue cuando escuché a mi tío contarle a mi mamá que él sí lo vio, pues andaba cerca de la entrada del artista comprando cosas y narró cómo se bajó del auto, que saludó y muchas chicas se echaron a correr mientras gritaban cosas como “Yo te mantengo”.
A las 6:00 al fin abrieron las puertas. El internet al igual que la señal estaban HORRIBLES, por lo que quienes no descargamos el boleto nos atrasamos en entrar; la verdad es que fueron muy rápidos en eso de la revisión de bolsas y que no lleváramos cosas que no se permitían.
La fila de merch dentro del recinto estaba enorme, pero para entrar al palacio había muchas entradas con filas muy pequeñas, lamentablemente la verdadera fila era en el sanitario. Yo me formé en el baño, mientras Jime compraba nuestras bebidas, ya que nos deshidratamos un poco al estar esperando tanto tiempo.
Apenas me reuní con Jime personas del staff vestidos de rosa se ofrecían para guiarnos a nuestros asientos, pero yo había escuchado en el baño decir que te pedían propina y que TODO estaba muy caro, poca fue mi sorpresa cuando Jime me lo confirmó, pues mi agua de 500 ml había costado $50.00.
Una vez sentadas en nuestro asiento una chica nos dio cositas para el fan project, al igual que chicas a nuestro alrededor nos dieron más freebies; pero para nuestra mala suerte ¡ese no era nuestro asiento! Los nervios nos ganaron y nos equivocamos de asiento, pero cuando llegamos a nuestros verdaderos asientos nos encontramos a la amiga de Ale, pues lamentablemente Ale tuvo que darle su oportunidad de ver a J Hope a alguien más, por cuestiones de salud.
Poco antes de iniciar el concierto, Army ya se estaba divirtiendo cantando canciones, recitando el fan chat y retumbando sus suelos la tierra, cosa que nos asustó al inicio pues pensamos que estaba temblando.
Pero de la nada las luces se apagaron, humo empezó a salir, un video introductorio empezó a correr en las pantallas y J Hope vestido de rojo salió al escenario. Cada una de las canciones que presentó hizo gritar, cantar y bailar a Army, lo cual era un poco complicado para las que estábamos en gradas, ya que el espacio del pasillo es como de 40 cm y muchas veces estuvimos a punto de caernos.
Apenas terminó el concierto Jime y yo intentamos colarnos al área de pista para poder recoger un poco del confeti y Hobi-billetes que lanzaron, pero nos descubrieron y no nos dejaron “ayudarles a barrer”. No nos quedó de otra que salir en búsqueda de la Urvan para poder regresarnos a nuestro bello Oaxaca.
La emotividad se notaba en la mirada de J Hope ese día, pues prácticamente nosotras también le dimos un concierto y ahora en redes sociales hemos podido ver como aún no supera los dos días en los que estuvo con nosotras, y cómo Army internacional felicita a Army mexicana, pues dejamos la barra muy alto y difícilmente se va a superar.
Artemisa de los Ángeles Bautista Cruz
estudiante de comunicación.
